La Fiscalía de Instrucción 1 de Posadas apeló ante el Superior Tribunal de Justicia (STJ-Misiones), el fallo que condenó a Eugenio Veiga (27 años) a cuatro años de prisión por la muerte de Cristian “Chiri” González (17 años), ocurrida el domingo 22 de julio de 2018 en una calle del barrio San Lorenzo de Posadas.
El Tribunal Penal 1 condenó a Veiga bajo los cargos de “homicidio en exceso de legítima defensa”, en medio de una supuesta en una pelea entre ambos que finalizó con la vida de González, tras recibir una mortal puñalada.
Para el representante del Ministerio Público Fiscal, Martín Rau, el Tribunal incurrió en una serie de agravios al aplicar la sentencia como ser: “Errónea aplicación de la ley, valoración parcial de la prueba, falta de imparcialidad y arbitrariedad”.
Tal vez te interese leer: Por un ajuste de cuentas narco, asesinos “a sueldo” acribillaron a balazos a Cristián Díaz en el barrio Yohasá de Posadas
El fiscal Rau manifestó en su apelación que los jueces que integraron el Tribunal Penal 1 durante el juicio oral y público (Viviana Cukla –Presidenta- , Juan Manuel Monte y Ángel Dejesús Cardozo, efectuaron “una valoración parcial de la prueba que afectó la garantía de imparcialidad, lo que a su vez conduce a la arbitrariedad del fallo” y que se resolvió “el pleito mediante una aplicación errónea de la ley sustantiva”, que viola el artículo 477 del Código Procesal Penal.
El recurso de casación presentado por el Fiscal solicita que “se dicte una nueva sentencia conforme a derecho, debiendo resultar el imputado condenado como autor penalmente responsable del delito de ‘homicidio simple’.
La condena
En la última jornada del juicio oral y público desarrollado en el Tribunal Penal 1, ubicado por calle La Rioja de Posadas, Eugenio Veiga, fue condenado a 4 años de prisión por ser penalmente responsable del delito de «homicidio en exceso de legítima defensa», establecido en el artículo 79 en función de los artículos 34 y 35 del Código Penal.
Estaba dispuesto para esta última jornada, la ronda de alegatos de clausura por parte tanto de la Fiscalía como de la defensa del imputado. En primer lugar, tomó la palabra Eugenio Veiga y contó cómo sucedieron, según él, los hechos aquella fatídica noche.
“Estaba cenando en la casa de mi papá, le dije si me podía prestar el machetito para ir a trabajar al otro día. Nosotros sacábamos abono y hacíamos jardinería. Estoy en la esquina y veo a un muchacho corriendo y otros tres atrás de él, a 10 metros”.
Prosiguió su relato “Yo estaba mirando. Vienen Cristian (González) y Elio (Cabral) y me dicen que vaya a tirarle piedras a la casa de unos brasileros, le dije que no, que tenía que ir a trabajar al otro día y me trataron de maricón. Me empezaron a pegar entre los dos, me pateaban en la cabeza, en las costillas, en el estómago. Venían otros para mí y uno de ellos tenía algo que brillaba, me asusté y con mi machetito empecé a tirar para todos lados. Después de eso dejé el cuchillo al costado de mi casa, me tiraban piedras desde afuera. Elio me decía que me iban a matar y prender fuego la casa”.
Luego de eso, el joven aseguró que salió por la ventana de su vivienda en dirección a la casa de su padre, a quien expresó: “Me mandé la peor macana de mi vida”, tal cual declaró su progenitor al comparecer en la audiencia anterior.
“Después vino Elio con la policía y me señaló a mí. Yo no me resistí, desde ese día estoy preso. Nunca me escondí, ni quince minutos tardaron en encontrarme, nunca salté de techo en techo porque hay tres metros y medio de distancia, es imposible. Nunca fue mi intención matarle a Chiripá”, cerró.
La Fiscalía pidió una pena por homicidio simple
Luego de la declaración del imputado, el siguiente en tomar la palabra fue el representante del Ministerio Público Fiscal, Martín Rau, quién insistió con el mismo pedido que en la etapa de instrucción, haciendo alusión al artículo 79 del Código Penal, homicidio simple, solicitando la pena de 15 años de prisión efectiva.
El letrado comenzó su alegato haciendo referencia puntualmente al tamaño del arma homicida y a la herida cortopunzante (22 centímetros) que le costó la vida al adolescente de 17 años. “Luego de una discusión con Elio Cabral y Chiripá, tomó un cuchillo de 34 centímetros y le incrustó a la víctima. Luego de eso se dio a la fuga hacía la casa de su padre, tirando el cuchillo”.
Según el fiscal, las dimensiones del arma blanca utilizada por Veiga se asemejan a un machete, no a un “machetito”. En segundo lugar, sembró dudas en cuanto a los testigos que comparecieron a la largo del debate. “El hecho es uno, el problema es reconstruirlo porque todos los testigos se contradicen entre sí”.
Rau descartó que la herramienta sea utilizada para jardinería porque el machete no tiene nada de filo. “Que oportuno pedir un cuchillo a su padre cuando el barrio estaba tan picado, lo pidió para una defensa no para jardinería”, recordando los innumerables disturbios que se ocasionaron aquel día en el barrio San Lorenzo.
Prosiguió manifestando que la defensa, a lo largo del debate, trajo testigos para justificar las “mentiras” del imputado. “Los hechos de los testigos son la mentira con las ropas de la verdad”.
Aseguró que el imputado no tenía lesiones al momento de su detención. “Cómo puede ser que una persona a la que le hayan querido matar, le pegaron con una hazaña, no tenga ni un sólo moretón. Una persona que tenga que usar un cuchillo de 34 centímetros para defenderse tenía que estar al borde de la muerte”.
Por último, la Fiscalía entendía que no existían elementos para justificar el actuar del imputado, quien es autor penalmente responsable del delito de homicidio simple (artículo 79) y dejó solicitada la pena de 15 años de prisión efectiva. “Cristian González era tan solamente un adolescente de 17 años, a quien el imputado le quitó la posibilidad de vivir su vida”.
Por un ajuste de cuentas narco, asesinos “a sueldo” acribillaron a balazos a Cristián Díaz en el barrio Yohasá de Posadashttps://t.co/mR2OaVJ97Z
— misionesonline.net (@misionesonline) May 11, 2022
Comentarios