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El sueño del pibe: con tan solo 11 años, el posadeño Bautista Vera ya vistió los colores de River Plate y Boca Juniors 

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Su amor por el deporte comenzó desde muy pequeño y lo mamó por la pasión de su padre. No es fácil para los niños dejar la familia para cumplir el sueño de todo pibe: jugar en Primera División pero Bauti lo quiere lograr. 

De muy pequeño, Bautista inició su amor por el deporte. Primero, vistió los colores de Gimnasia de Posadas, equipo que dirige su padre, Rodrigo Vera. Luego, River Plate se fijó en el crack posadeño, jugó en las interiores del equipo de Nuñez e incluso ganó un título con el millonario. 

Tiempo después, el fútbol le traería una sorpresa, Boca Juniors se interesó con el “pibe” y lo llamó para vestir la camiseta azul y oro. Hoy en día, Bautista juega en las inferiores del xeneize y sueña con jugar en La Bombonera. 

Bautista Vera
El sueño del pibe: con tan solo 11 años, el posadeño Bautista Vera ya vistió los colores de River Plate y Boca Juniors

Zurdo y con buena pegada, Bautista quiere alcanzar su sueño y tener minutos en la élite del fútbol de Argentina. Claro… no será fácil, deberá soportar la presión, la ansiedad y sobre todo entrenar y entrenar para lograr el objetivo. 

La historia del jovencito en River iba bien, el club millonario lo quería pero no lo podía fichar. Sin embargo, sus cualidades como futbolista le abrieron las puertas y quién apareció… desde la vereda de enfrente rápidamente se comunicaron con el “crack” para que juegue en Boca Juniors. 

Gritó campeón con River

Le convocaron para realizar una prueba en Boca, pero con solo una práctica los cazatalentos dijeron el “misionero queda”.  Luego de la prueba, el pibe se dió el gusto y vistió la camiseta con el mismo escudo y colores que una vez utilizó Juan Román Riquelme para vencer al Real Madrid. 

Ahora el joven descansa en su Posadas natal y recarga energías para febrero donde volverá a presentarse en Buenos Aires para entrenar y esperar el torneo venidero. 

“En River él jugaba de volante por izquierda y en Boca comenzó a jugar también en la misma posición. Tiene buena pegada y un buen físico”, dijo su padre, quién opiná no como papá sino como entrenador.

El “pibe” es categoría 2002 pero está acostumbrado a jugar con niños más grandes y entonces su físico le permite marcar la diferencia. “Como familia estamos muy felices por él”, dijo Rodrigo Vera.

Por lo pronto, Bautista deberá seguir entrenando y teniendo los pies sobre la tierra. Material hay y mucho, ahora dependerá de él llegar al fútbol grande. Su padre, a partir de febrero, irá con Bauti hacia Buenos Aires para instalarse a vivir en la ciudad de la furia e incrementar la ilusión de jugar en Primera. 

Con tan solo 11 años, el posadeño Bautista Vera ya vistió los colores de River Plate y Boca Juniors

 

 

 

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