Hidrógeno Verde: una alternativa energética sustentable

Se lo denomina la energía del futuro por utilizar energías renovables en su producción.

En la última cumbre mundial sobre el clima celebrada en Glasgow, la COP26, nuestro país anunció que la empresa australiana Fortescue Future Industries invertirá 8.400 millones de dólares en la Patagonia, para la producción de hidrógeno verde. El proyecto prevé convertir a la provincia de Río Negro en un polo mundial de exportación de este combustible con una producción de 2,2 millones de toneladas anuales en 2030.

En este sentido nuestro país busca no quedar afuera de la reconversión energética que mejore las metas planteadas para el cambio climático. En la cumbre de Glasgow, varios países latinoamericanos, entre ellos el nuestro, reclamaron financiación internacional y canjes de deuda externa a cambio de acciones medioambientales.

Al respecto conversamos con el Dr. Gabriel Correa, investigador adjunto del CONICET en el Centro de Investigaciones y Transferencias de Catamarca y especialista en temas de almacenamiento de energía mediante hidrógeno y baterías secundarias, quien nos explica el tema del hidrógeno verde.

¿Qué es el hidrógeno verde?

“El hidrógeno es el elemento químico que más abunda en nuestro universo, pero no se encuentra solo en la naturaleza por lo tanto hay que insumir energía para poder producirlo.

Existen diferentes modos de producción del hidrógeno, por ejemplo, el que se obtiene mediante la aplicación de corriente eléctrica para separar la molécula de agua en dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno (electrolisis), para ello se requiere energía eléctrica que puede provenir de fuentes de energía renovables.

Esa cadena de producción de hidrógeno hace que sea una producción sin emisión de gases de efecto invernadero y por lo tanto se lo llama hidrógeno verde. La forma de producción más usada o difundida de hidrógeno, es la producción a través de los hidrocarburos que tiene altas emisiones de gases de efecto invernadero”

¿Porque se dice que es uno de los combustibles del futuro?

La mayoría de las economías centrales han diseñado la transición energética pensando en el hidrógeno, porque es un vector energético que puede ser utilizado como combustible, ya que es un elemento químico que almacena una gran cantidad de energía, tiene un gran poder calorífico y además se lo puede utilizar para generar energía eléctrica, a través de un dispositivo que se llama pila de combustible, también se lo puede utilizar en sectores de la industria donde se necesiten procesos térmicos, en el sector del transporte, además se lo puede usar como combustible gaseoso para los domicilios.

Por todas estas características el hidrógeno se está pensando como vector energético combustible del futuro.

Para producir hidrógeno verde se requiere de grandes cantidades de energía para separar las moléculas de hidrógeno de las demás y poder usarlas. ¿Con que energía se hace ese proceso?

Para producir el hidrógeno se utiliza un proceso que utiliza energías renovables y que se denomina electrólisis del agua (separar las moléculas de agua en oxígeno e hidrógeno), en nuestro país particularmente tenemos una fuente de energía renovable extraordinaria en la Patagonia, que es el viento y un recurso solar muy importante en el norte. Esto hace que el hidrógeno producido a través de esta forma (electrólisis) es de costo mucho más económico que en otros lugares del planeta.

En el proyecto anunciado hay algunas divergencias, se ha planteado que se va a utilizar agua de mar, que se la va a desalinizar para poder utilizarla, efectivamente ese proceso de desalinización sería muy costoso desde el punto de vista energético, y haría que el hidrógeno producido sea menos competitivo con el hidrógeno generado a través de los sistemas tradicionales.

Hay muchas investigaciones a nivel mundial y en nuestro país para ver de qué forma se puede generar este hidrógeno con el menor costo posible y el menor impacto ambiental.

Actualmente existen en el país proyectos para desarrollar materiales para electrodos que trabajen con agua de mar, con eficiencias apropiadas y con suficiente estabilidad a la corrosión generada por la alta concentración de cloruro de sodio presente en el agua salada. Otra de esas posibilidades es la utilización de la fotoelectrolisis que podría ser una opción más económica y con menos uso de recursos. Ambas tecnologías se encuentran etapa de laboratorio.

¿Qué puede aportar a estos nuevos tipos de producción de energía el Sistema Científico, Tecnológico de nuestro país?

Particularmente me parece importante manifestar desde el punto de vista de la ciencia y la tecnología en nuestro país, que es muy importante que todos los avances que se hagan en este sentido y particularmente aprovechando el interés que ha generado el anuncio de este proyecto, es que nuestro país desarrolle investigaciones en hidrógeno.

Argentina tiene en su sistema de ciencia y tecnología, hace muchos años, un desarrollo importante con temas de hidrógeno y es necesario que estas investigaciones puedan ser financiadas para poder acompañar este proceso que posibilite una trasferencia tecnológica a muy corto plazo a la industria de nuestro país, para que se puedan generar los dispositivos necesarios para que argentina tenga la soberanía tecnológica para este nuevo paradigma energético que se está discutiendo en este momento.