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Una menor de 16 años se recupera favorablemente tras ser atropellada dos veces por su propio tío el pasado 17 de julio, como consecuencia de una discusión familiar.
En un primer momento la adolescente fue trasladada de urgencia al Hospital de Andresito y luego derivada al Samic de Eldorado para mayor atención. Fue examinada por el médico de turno quien determinó que la misma sufrió fractura de pelvis, tórax y costilla. Fue dada de altas en las últimas horas pero deberá permanecer en reposo.
En diálogo con Radio Activa, la madre de la menor, Angélica De Lima comentó y relató cómo se dieron los hechos. «Quiero hablar porque el tío Carlos G. se presentó en Iguazú con un abogado solicitando una pericia al auto que está secuestrado pero él está trabajando como si nada hubiese ocurrido. Me dicen que yo me tenía que haber presentado a realizar la denuncia el pasado domingo pero no tenía cómo, mi hija estaba muy mal después del accidente en el hospital y por ese motivo se adelantó y se presentó con un abogado».
La familia de la víctima no se encuentra en condiciones económicas para acceder a un abogado, «nadie me puede asistir para ver si mi denuncia está bien o mal, no tengo quién me acompañe para ver qué tengo que hacer. Él está pidiendo que paguemos los daños que se ocasionó en el auto pero nada fue intencional sólo queríamos sacar a mi hija que estaba debajo, creo que él tiene que estar detenido, está a metros de mi casa y no podemos dormir tranquilas».
«Todo comenzó cuando mi hija fue a buscar a su papá pero el tío la empieza a agredir con golpes, entonces se retira y sale para llamar a la Policía, yo grito que la deje de golpear y en ese momento no alcanza a salir a correr cuando sintió un golpe en la rodilla en la parte trasera y cuando se dio cuenta ya estaba bajo del auto. El hombre también intenta atropellar a mi mamá pero acelera nuevamente y la arrolla nuevamente a mi hija, con otro familiar la alzamos a un auto para llevarla al hospital lo más rápido porque si esperábamos a la ambulancia se nos moría», expresó.
Por último expresó su malestar en cuanto a que el agresor continúa su vida en libertad mientras su hija se encuentra en malas condiciones tanto de salud como físicamente, «él está trabajando y ronda cerca de mi casa y mi hija no puede dormir del miedo que le quedó. No entiendo a la justicia y está bien porque no tengo abogados pero necesito una respuesta”, cerró.
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