Carlos Rovira: “Con la economía del conocimiento Misiones no va a parar de crecer”

El presidente de la Cámara de Diputados de Misiones participó de la inauguración del moderno, tecnológico y sustentable edificio del Tribunal de Cuentas “la única obra pública institucional del año” en la Argentina. Destacó que el Silicon Misiones permitirá a los misioneros el acceso educativo similar a Harvard, en cuanto a contenidos. Se refirió además a las desigualdades de Nación y dijo que “a la falta de amor del país central, les respondimos con un proyecto de creación de áreas aduaneras especiales, que le va a permitir a los misioneros, comprar un 50% más barato”.

Desde la última sesión ordinaria de la Cámara de Representantes, hace dos semanas, el ingeniero Carlos Rovira no se mostraba en actos públicos ni tampoco desde la virtualidad. Sin embargo, este viernes por la tarde-noche, eligió acompañar al gobernador Oscar Herrera Ahuad, el intendente Leonardo Stelatto y a la presidenta del Tribunal de Cuentas, Fabiola Bianco, a la presentación en sociedad de un moderno edificio a disposición del organismo, que controla las cuentas públicas en Misiones.

No fue elegido al azar el evento, porque la construcción ubicada en Buenos Aires y Roque Pérez de Posadas, respetando la historia de una vieja casona del lugar, yergue una obra que representa el nuevo concepto que le imprime el gobierno provincial, con edificaciones modernas, de vanguarda, innovadoras, tecnológicas y sustentables.

Tras los episodios de rigor, que comprendió la bendición del obispo Juan Martínez, el tradicional corte de cintas, una breve recorrida hasta el SUM central y los discursos de la anfitriona y las principales autoridades del municipio y la provincia, Carlos Rovira bajó un mensaje repleto de conceptos, ideas superadoras y trazó el objetivo que persigue cada uno de los proyectos que están en marcha.

Estrategia binaria y el veloz desendeudamiento

“Estamos en un contexto que nos permite diferenciarnos del resto del país y del resto del mundo y es producto de los misioneros. Que hoy tengamos estándares de sanidad que nos despejan de otros sitios lamentables, signados por la muerte y por la precariedad de los servicios sanitarios y del recurso humano y también la posibilidad de atacar lo urgente sin descuidar lo importante y lo previsible, lo planificado”, comenzó analizando Rovira, ante la pregunta de Misiones Online.

“Hoy la obra pública en el país está parada. A duras penas y con mucho esfuerzo, la Nación y algunas provincias destinan a resolver cuestiones sanitarias. Sin embargo, Misiones inaugura la única obra pública institucional de todo el año en curso”.

Destacó el conductor de la renovación que en “todos estos años, hemos sembrados cimientos muy sólidos desde la política y fuimos cumpliendo con la palabra empeñada, en todos los aspectos. El más importante quizás sea que, para ser previsibles y cumplidores hay que tener en cuenta el aspecto económico. Esta provincia se fue alejando de una etapa de endeudamiento crónico para pasar a una etapa veloz de desendeudamiento que hoy nos permite independencia económica y política”.

El misionerismo

El mensaje se metió de lleno en la cuestión política y Rovira explicó que la Renovación, “no es un frente atado a las decisiones de los partidos nacionales. Sí atado al interés y a la elección del pueblo misionero. Hoy el mundo se está alejando de los grandes partidos, de las grandes corporaciones políticas. Está yendo hacia lo local, hacia lo pequeño que hay que atender. Por eso hay una nueva arquitectura política”.

Recordó que “en las últimas elecciones, nuestro frente se presentó como Renovación 5.0, que significa innovar también en la política, en los procesos decisionales. Quiénes encaran una lista de diputados, quién lleva adelante la misión de renovar los cuadros institucionales de los ministerios para buscar más proximidad, más eficiencia, para interpretar una etapa de cambios que vienen de la mano de cambios de paradigmas”.

Explicó que “son cambios que tiene que ver con la prospectiva, reemplazar un proceso que ha quedado antiguo, desplazado por factores como la tecnología. Para quién hoy domina la cuestión digital, aplaude esos cambios. Pero quien es nonato digital, le cuesta entender los procesos binarios”.

“No hay justificativo en el derrotero de una sociedad para desviarse de estos cambios. Hay que tomarlos y ya se nota el delay que hay entre la decisión tomada y el cambio aplicado y luego el beneficio. En ese recorrido pasamos primero de una tenue aceptación a una aceptación completa”, dijo el titular del Poder Legislativo.

“Un ejemplo claro es la Costanera de Posadas, que en los primeros metros era una férrea oposición y a medida que comenzaron a aparecer las máquinas y comenzó a vislumbrarse los cambios y hacia dónde iba, la opinión cambió. Y hoy la aceptación es de todos los argentinos que se encuentran con una interfase de agua y cemento maravilloso”, agregó.

Nuevos procesos

Para entender los cambios que hace tiempo encara el gobierno de la Renovación, Rovira mencionó “el clivaje, la ruptura entre lo viejo y lo nuevo y hoy felizmente se dan en la provincia en los órdenes y en las materias más importantes de la vida pública. Empezando por lo institucional, porque siempre el acceso a la información, al conocimiento, al estudio, a la educación, es la llave más importante que tiene cualquier ser humano para desempeñarse en la vida. Sea individual o colectivo”.

Enseguida ponderó a la educación misionera “que, en silencio, casi sin inconvenientes, transcurre un proceso de innovación sin par. Alentados por experiencias ya palpables como la Escuela de Robótica, ya dese el nivel inicial. Jugando aprenden conceptos de vanguardia, conceptos duros. Desde Posadas y alumbrada hacia toda la provincia a partir de una ley que permitirá a todos tener aulas maker con todos los elementos tecnológicos”.

Profundizando las nuevas formas de enseñando, repitió que “allí también hay un proceso de clivaje entre el docente que imponía la dictadura del aprendizaje y el resto de los educandos callados a rajatabla copiaban lo que le enseñaban. Ese proceso fue muy bueno desde comienzos de siglo pasado y que arrancó con el adoctrinamiento de los militares en la primera guerra mundial. Y eso se extendió al modelo áulico. Eso cambió y ahora se expone todo en un mismo pupitre comunitario que permite aprovechar la inmensa capacidad neuronal del cerebro y que lo tenemos dormido”.

“Ahora se trata de expandir esa capacidad, ya hay nuevos estándares. Antes nos deslumbrábamos con el famoso coeficiente intelectual. Hoy ese término pasó de moda y está la inteligencia emocional, que mide los tres lóbulos cerebrales y que no actúan separados, sino hoy la neurociencia nos da, muy ligada a la pedagogía cognitiva, luces que antes eran tinieblas”, subrayó.

Silicon Misiones

Sin interrupciones en su relato, Rovira hiló el concepto de la educación y sus nuevas formas al advenimiento del Silicon Misiones, “que va a permitir recrear un ecosistema de la economía del conocimiento único en el país. Para capacitar no solo laboralmente. Ahora los procesos se acortaron tremendamente y hoy tenemos jóvenes en toda la provincia, accediendo a estos nuevos términos y en proceso totalmente gratuitos del mejor nivel mundial. Lo mismo que están enseñando en la Universidad de Harvard, los mismos contenidos, los tenemos y los vamos a tener extensivamente en el Silicon Misiones”.

“Misiones esta sembrando hoy, pero la cosecha, no tengo dudas que va a ser abundante”, expresó Rovira.

“La cosecha de acá en el Tribunal de Cuentas en cuanto a la transparencia y el control de las cuentas públicas de los 77 municipios. Y desde la Legislatura estamos trabajando en un proyecto que lo vengo pensando desde mi época de intendente de Posadas, para que los electos tengan la obligación de conocer la rutina administrativa, y sobre todo los procesos que tienen que ver los respectivos presupuestos. No sólo para ser más justos en la ejecución, sino en la transparencia”.

La rebeldía del misionero

En el relato de las grandes transformaciones que fue generando los distintos gobiernos provinciales desde el 2003 hasta el presente, se resumió en una frase: “El denominador común es que las grandes cosas vienen de la mano de pensamiento muy simples”.

Argumentó Rovira que “en estos 20 años hubo que derribar el obstáculo de la incomprensión. Hoy Misiones, a la nuestra, con nuestros recursos, primariamente, con nuestra gente, con nuestro modo, que es rebelde y ataca con rebeldía la dificultad, las piedras en el camino, los desvíos, pero con mansedumbre en los modos de entenderse con la sociedad y con el resto del país”.

Menos coparticipación, más beneficios para los misioneros

Lentamente fue regresando en su discurso Rovira, a la cuestión política y las desigualdades que sufre Misiones desde el país central, de antaño. “No somos separatistas, pero si somos reivindicadores con una historia esquiva con nuestra provincia, que mucho tiene que ver la cuestión política. Misiones ha venido perdiendo injerencia en la coparticipación que es una síntesis, no solamente económica, sino un poquito la escala del amor de cómo te mide la Nación o el país central. Tenes un puntito más, te quiere más, tenés un puntito menos, te quiere menos y esa esa es una forma de atender necesidades”.

“A esa falta de amor, en esta última etapa le hemos agregado una actitud seria, responsable e inteligente y un planteo distinto. Felizmente estamos a un paso de concretar la zona diferencial aduanera en Misiones, que va a permitir a todos los cuidadanos, de poder disfrutar muy pronto del goce comprar y vender, primero entre nosotros, de todo tipo de bienes y servicios sin los impuestos nacionales, que son la principal carga”.

Concretamente dijo Rovira que, para la implementación de áreas aduaneras especiales, “significará una baratura del 50% o más de lo que hoy nos cuesta, frente a nuestro propio país y a los países vecinos. Viene un sistema económico diferente, la economía de Misiones no va a parar de crecer y como somos inteligentes los misioneros, ese crecimiento va a significar por efecto de apalancamiento, recrear otros espacios como los de la economía del conocimiento, espacios tecnológicos de alto capital donde la inteligencia que estamos creando en estos sistemas, va a jugar un papel fundamental porque ya vamos a tener preparada la mano de obra para atacar esos nichos que hoy mueven el mundo”.

A modo de conclusión, Carlos Rovira sentenció que “Misiones se va preparando, silenciosamente para la economía pos pandemia, del futuro. Y esa resiliencia, la facultad innata o adaptada que tiene una sociedad o individualmente una persona de enfrentar una situación traumática, enfrentar un problema y ponerse de pie inmediatamente para salir adelante. Otras sociedades no las tiene y el misionero es luchador, ahí está la rebeldía”.

“Está en nosotros mismos llegar al último piso o a un piso elevado o quedarnos en la planta baja o en la vereda, mirando como miramos tanto tiempo cuando veíamos antes el edificio del Tribunal de Cuentas y vivíamos con el temor de la implosión, de que alguien fallezca por la cantidad de expedientes que había. Con la persistencia, el trabajo constante y la inteligencia aplicada al servicio de los demás, se puede llegar muy lejos”, concluyó.