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La cuarentena cumple 140 días en todo el país. Siempre que se habla del aislamiento social, se lo realiza desde un aspecto económico, y no tanto lo mental. Facundo Manes dialogó con el ciclo televisivo «Intratables» y en su entrevista mencionó que «seis de cada diez argentinos tienen depresión». A su vez, el neurólogo explicó un estudio que realizaron con el Instituto de Neurología Cognitiva (INECO).
«Desde la Fundación INECO realizamos un estudio desde inicios de la cuarentena», comenzó diciendo el entrevistado. «Encontramos muchos niveles de ansiedad en el principio, pero hoy encontramos que más de la mitad de los estudiados, tienen depresión», aseguró Manes en el diálogo que mantuvo con el programa de América TV. «6 de cada 10 argentinos tienen depresión», dijo.
En este sentido, agregó que «casi todos tenemos fatiga mental». Explicó que cuando estamos cansados, tendemos a actuar con exceso de confianza y no nos cuidamos.
Dicha fatiga, o ese sentimiento de tener “la cabeza quemada” -rutina, aislamiento, alejamiento de la vida social, son cuestiones que también se suman- enciende alertas. “Es el momento que más tenemos que cuidarnos porque aumenta la curva y cuando uno está quemado empieza a tomar decisiones sin tanta reflexión”, señalaba Manes.
Sobre los jóvenes, el neurólogo aseguró que «son los que más están sufriendo». «Ocho de cada diez presentan síntomas de ansiedad y angustia», detalló el especialista.
Según anunció el presidente de la Nación, Alberto Fernández, el aislamiento se extenderá hasta el 16 de agosto. «Al principio (de la cuarentena) tuvimos cierto estrés por el cambio, pero ese estrés se hizo crónico», explicó el neurocientífico. «Entramos en el síndrome del quemado», indicó Manes.
De acuerdo a lo que señaló, ésto significa que «estamos más apáticos, con sensación de angustia, podemos dormir más, nos quedamos más (tiempo) en la cama, más irritable», describió el político argentino. «Esto se lo percibe en el personal de la Salud, que está en el frente de batalla», sostuvo.
El último informe de la Fundación INECO encendió la alarma sobre la salud emocional de los argentinos. El relevamiento indica que un 45% de las personas que reportaron signos de decaimiento anímico «relevantes», ya sean clínicos o subclínicos, tras los dos primeros meses de cuarentena, una cantidad «mayor» a lo esperado en circunstancias normales.
«En general, estos estudios muestran un impacto de la cuarentena emocional en un porcentaje elevado de la población, alrededor de un tercio o un poco más», señala por su parte Fernando Torrente, psicólogo y director del Instituto de Neurociencias y Políticas Públicas de la Fundación INECO.
De hecho, al inicio del confinamiento un 23 % de la población ya mostraba ansiedad «a niveles significativos», mientras que otro 33 % presentaba «signos compatibles con estados depresivos», según otra investigación realizada por la misma entidad con 10.000 participantes de todo el país suramericano.
La importancia de ocuparse de la salud mental
Finalmente, el neurólogo afirmó que «si no nos ocupamos de la salud mental, estos síntomas se pueden cronificar». «No nos vamos a recuperar como país si no estamos motivados», dijo Manes en declaraciones televisivas. «La gente está fatigada con el cumplimiento de normas, y es importante que lo vean las autoridades», continuó el especialista. «Hay agotamiento emocional, estrés, desapego de otros, frustración, e insomnio», cerró.
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