La celebración católica comenzó con la tradicional peregrinación a pie y a caballo junto a la imagen de Santa Rita desde la Iglesia Catedral en la plaza 9 de Julio hasta la iglesia ubicado en el barrio Santa Rita.
La misa central, que tuvo lugar al finalizar la procesión, estuvo a cargo del Obispo de Posadas y congregó a una gran multitud de devotos. En su homilía y luego de las lecturas bíblicas del día, el obispo llamó a ser solidarios, a tener fe y esperanza y a dejar los individualismos de lado. De esta manera, marcó un norte para estos tiempos de crisis con conceptos como: “El otro es mi hermano, no es mi enemigo, no es alguien para marginarlo, todo varón y mujer son mis hermanos” e hizo notar que impera “una cierta campaña y maneras en que se promueve el individualismo sin solidaridad”. Ante este signo de época advirtió: “Los cristianos no somos cristianos si no amamos a nuestros hermanos y especialmente a nuestros hermanos más pobres. No es una opción política, es la opción de Jesús, es el Evangelio”.
Fuente: radio up. territorio. primera edicion
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