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Con una disciplina de anuncios diarios, muchos de ellos de impacto directo en los castigados bolsillos de los asalariados sumada a una intensiva campaña de cuerpo presente focalizada en distritos considerados estratégicos, Sergio Massa se hizo espacio en el centro de la agenda política nacional y logró desplazar a Javier Milei, que después del pico de exposición que tuvo en la semana posterior a las PASO, comenzó a bajar su perfil.
La que no consigue imponer su propia agenda es Patricia Bullrich. A pesar de los generosos espacios que le reservan los medios afines a JxC, ninguna de sus apariciones mueve la aguja. La “filosofía muy particular” que intentó explicar sin éxito en los estudios de TN, ni la incorporación del ensayista Santiago Kovadloff como brazo ejecutor de esa doctrina, despertaron el más mínimo interés.
El nuevo perfil de señora moderada que adoptó la candidata cambiemita desorienta a quienes aprendieron a amarla combativa y beligerante y está demostrando ser insuficiente para seducir a los larretistas heridos tras la sangrienta interna.
Además, debe soportar el fuego amigo de Mauricio Macri que sigue empeñado en destruir la alianza que él mismo creó. El expresidente cada vez disimula menos su desinterés por conservar las buenas relaciones con los radicales. “El populismo es contagioso”, fustigó el integrante del seleccionado argentino de bridge, pero esta vez no se refería a ningún peronista, sino a los cuatro radicales que dieron quorum para que se abriera el debate en Diputados del proyecto de eliminación de la cuarta categoría del impuesto a las ganancias.
A pesar del voto en contra cambiemita, el proyecto enviado por Massa a la Cámara baja se aprobó gracias al respaldo en pleno del peronismo, de los partidos provinciales y de Milei y sus libertarios que votaron en coincidencia con su prédica constante de bajar impuestos.
En términos político/electorales, la media sanción del proyecto que exime a los trabajadores del pago del impuesto a las ganancias resultó una carambola a tres bandas para el ministro-candidato que en mismo movimiento consiguió erigirse en el impulsor de una medida que desde hace mucho tiempo vienen reclamando los asalariados de ingresos medios y altos, consolidó su imagen de hábil operador político capaz de concretar acuerdos trasversales y puso a JxC ante la odiosa tarea de votar en contra de lo que ellos mismos venían pregonando hace muchos años.
Massa se apresta a cumplir la promesa que Macri repitió hasta el hartazgo en su campaña de 2015 y en el camino terminó desnudando las inconsistencias de un espacio que desde hace décadas viene martillando con aquella letanía de que “el salario no es ganancia” pero que a la hora de votar, lo hizo en contra de la posibilidad de que los trabajadores no paguen ese impuesto.
En la misma contradicción cayeron los diputados nacionales por Misiones que votaron en contra de un beneficio para los trabajadores. Son los mismos diputados que también habían votado en contra del presupuesto nacional 2023 con obras para Misiones, contra la zona aduanera y ahora contra el beneficio de quitar impuestos al salario.
Para los trabajadores que estaban por debajo del piso de ganancias previo a la seguidilla de anuncios, el ministro de Economía puso en marcha esta semana el “Compre sin IVA” que no es otra cosa que una versión nacional del Ahora Canasta que en Misiones rige hace muchos años.
De hecho, varias de las decisiones que adoptó Massa en los últimos meses se parecen mucho a pedidos que en su momento formuló Misiones, como la quita de retenciones a las exportaciones de las economías regionales.
Desde 2016, la Provincia sostiene diferentes programas que ofrecen a los consumidores la posibilidad de comprar en hasta 18 cuotas sin intereses y con reintegros a través de los programas Ahora, pensados para aliviar los efectos de la crisis económica en los bolsillos de los consumidores y para sostener el consumo y las fuentes de trabajo.
Más allá de los detalles puntuales de instrumentación, las medidas anunciadas por Massa apuntan en el mismo sentido, con lo cual no sería aventurado hablar de las políticas y programas adoptados en Misiones como ejemplo para mejorar la vida de todos los argentinos.
Lo que ahora deberá demostrar el Gobierno nacional es la misma capacidad que tuvo Misiones de aplicar medidas de alivio al bolsillo de la gente sin que ello implique comprometer las cuentas fiscales.
La visita del candidato de UP a la provincia, el último lunes, sirvió para consolidar la alianza entre el candidato oficialista y el Frente Renovador misionero. Durante un acto que compartió con Massa, el gobernador Oscar Herrera Ahuad instó a los intendentes presentes a ponerle el cuerpo a la campaña, a militar la boleta completa y les advirtió que si cualquier otro candidato resultara presidente, la gestión de la provincia y la de todos los municipios resultaría mucho más difícil.
El mandatario misionero les recordó que los programas de ajuste y los esquemas cambiarios rígidos, como los que proponen Milei y Bullrich, siempre fueron especialmente perjudiciales para las zonas de frontera, como lo es Misiones en prácticamente todo su territorio.
Pero a no confundir, el apoyo del gobierno de Misiones a Massa no implica de ninguna manera renunciar al objetivo central de bregar por los intereses de la provincia. Tan es así, que después de que Herrera Ahuad conminara a los intendentes a militar puerta por puerta la candidatura de Massa, al ministro de Economía recibió en mano un planteo de la Provincia por una compensación por el impacto que tendría la modificación de ganancias en los fondos coparticipables.
El tema ya había sido abordado en el marco de la Comisión Federal de Impuestos, que tiene al propio Safrán como uno de los miembros más activos, y derivó en una presentación de un proyecto de ley que lleva las firmas de los diputados misioneros Diego Sartori y Carlos Fernández, que propone que un 30% de lo recaudado en concepto de impuesto a los créditos y los débitos sea coparticipado para compensar la reducción en la recaudación de ganancias.
Tal vez el saldo más significativo de la visita de Massa pasó por el anuncio de dos obras de infraestructura energética largamente reclamadas por Misiones: la segunda línea de 500 kV que permitirá duplicar la capacidad de transmisión desde la central de Yacyretá a la provincia y una línea de 132 kV que lleve energía desde Posadas hacia la zona Centro.
Milei y la casta
Mientras Massa intenta encolumnar al voto peronista con recorridas en provincia de Buenos Aires y las provincias del Norte Grande y al mismo tiempo busca pescar fuera de la pecera tentando a radicales y peronistas que buscan escapar del escorado barco de JxC, el libertario Javier Milei se esfuerza por demostrar que sí tiene capacidad de armado político, aunque ello implique cerrar filas con lo más rancio de la casta sindical.
Hasta su triunfo en las PASO, el candidato de La Libertad Avanza se mostraba como una suerte de Llanero Solitario de la política, dispuesto a confrontar contra quien se le pusiera enfrente. Pero ante la posibilidad cierta de convertirse en presidente, se vio obligado a mostrar equipos y algo parecido a una estructura política para dar respuesta a las dudas que se plantearon desde distintos sectores respecto a su capacidad de generar gobernabilidad.
Después de coquetear con Mauricio Macri, quien nunca aceptó ni declinó la propuesta de participar activamente en un eventual gobierno libertario, Milei se terminó apoyando en dos viejas figuras del sindicalismo burocrático: el gastronómico Luis Barrionuevo, dueño de la célebre frase “tenemos que dejar de robar por dos años” y el eterno líder de la UOCRA, Gerardo Martínez.
El pulso de las encuestas
Los sondeos realizados luego de las PASO muestran que Milei tuvo un rápido crecimiento que encontró su techo cerca de los 40 puntos, pero en las últimas semanas comenzó a bajar. Massa logró absorber inmediatamente el voto a Juan Grabois y siguió creciendo, aunque mucho más lentamente que Milei. Bullrich arrancó desde muy atrás porque no consiguió captar a la totalidad de los votantes de Larreta, pero tuvo un leve repunte tras la incorporación de Carlos Melconian a su equipo.
Una de las encuestas más esperadas fue difundida el viernes. Se trata de un trabajo de la encuestadora Celag, una de las que más se acercó a los resultados en 2019 y en las últimas PASO y que además trabaja en modalidad presencial que se considera el método más preciso.
Dicho estudio arrojó un escenario muy parejo, con Milei alcanzando 33,2% de los votos, Massa 32,2% y Patricia Bullrich 28,1%.
Otras cinco encuestas realizadas a lo largo de septiembre coinciden con el trabajo de Celag en cuanto a la ubicación de los candidatos, aunque con diferencias en el porcentaje de intención de voto atribuido a cada uno de ellos. El mayor porcentaje para Milei es de 35% y se lo atribuye Opinaia y los mejores registros para Massa y Bullrich son los que aparecen en el estudio de Celag.
A esta altura de la campaña, hay consenso entre los encuestadores en el sentido de que lo más probable sería un balotaje entre Milei y Massa y que un triunfo en primera vuelta es poco probable.
Precavidos, los propios encuestadores advierten que ningún sondeo debería tomarse como un pronóstico dada la tendencia en un número creciente de electores a definir su voto a último momento, lo que revela a un votante que no está convencido de ninguna de las opciones.
La previsibilidad de Misiones
Se aprobó presupuesto de Misiones para el año 2024 que se destaca por un 69% de inversión en áreas sociales. La inversión en educación alcanza los 329 mil millones de pesos, que servirán para financiar las 2.961 escuelas y 457 mil alumnos de la provincia, además de estar proyectado el mantenimiento con recursos propios del boleto estudiantil gratuito.
Se continuará impulsando la educación disruptiva, compuesta por instituciones como la escuela de robótica, espacios Maker, escuela de innovación, Silicon Misiones y el Parque del Conocimiento, espacios que promueven la transformación del conocimiento en innovación y trabajo.
Mientras que a Salud se direccionan casi 289 mil millones de pesos, continuando con una política que llevó a la provincia a indicadores que la posicionan dentro a los Objetivos de Desarrollo Sostenible instauradas por las Naciones Unidas en su meta hacia el 2030, correspondientes a mortalidad infantil, mortalidad materna y mortalidad neonatal. También se prevé financiamiento para remodelaciones de centros de atención primaria de la salud y obras de los hospitales de mediana complejidad.
Los recursos para la ejecución de obra pública representan 23,7% del presupuesto, sin endeudamiento. Dicha inversión se traduce en viviendas, rutas, escuelas, entre otras cuestiones vitales para la sociedad.
Por último, las erogaciones del presupuesto destinadas al pago de la deuda pública significan solamente 0,30% siendo comparativamente menos su participación presupuestaria con respecto al año anterior, siguiendo la “Identidad Misionera” del no endeudamiento.
El Presupuesto aprobado el jueves pasado es resultado de una administración ordenada que brinda certeza y previsibilidad en medio de un desorden nacional.
Como desde hace años se destaca la disciplina fiscal, la fortaleza y seriedad del manejo de las cuentas públicas. Se cuidan los recursos lo cual permite absorber costos de todas las prestaciones para cuidar el bolsillo de los misioneros.
La acción política de la Legislatura durante su tratamiento y la conducción de este vital poder permite tener en Misiones las cuentas con previsibilidad, anticipación y transparencia situación que contrasta en un contexto nacional plagado de peleas estériles que no aportan soluciones a la gente.
Mientras el país se debate entre un modelo de Estado presente pero con desorden fiscal y otro que propone poner las cuentas en orden, aunque ello implique dejar a los ciudadanos a la buena Dios, Misiones brinda un ejemplo práctico que demuestra que con administración responsable se puede tener un Estado que aporte soluciones a la gente sin que ello implique resignar orden fiscal ni crecimiento de la economía.
La existencia de un Estado que acompaña a su gente y a sus sectores productivos para asistirlos, fortalecerlos y potenciarlos se demuestra con la implementación de las políticas tendientes al desarrollo y el crecimiento de la Economía del Conocimiento; la instrumentación de los distintos programas inclusivos desde el Ministerio de Desarrollo Social; el desarrollo empresarial y tecnológico que se está gestando en el Parque Industrial y de la Innovación de Posadas; el acompañamiento que se realiza y las políticas que se aplican para con todos los sectores productivos; la recuperación del puerto de Posadas y sus ventajas logísticas para nuestro sistema productivo, el crecimiento de la red vial y de la red de alta tensión; la promoción del turismo misionero y los planes “Ahora”, para fortalecer la microeconomía y la economía familiar de los misioneros, entre tantas otras políticas públicas que podríamos seguir mencionando.
Y todo lo hecho en el marco del cuidado ambiental y de la preservación de los recursos naturales.
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