El mandatario había afirmado la semana pasada, cuando trascendió la amenaza contra la familia de Lionel Messi, que «algo más habrá que hacer» sobre la situación de la violencia y el narco en Santa Fe.
La idea de dar cierta participación al Ejército se conoció brevemente durante la entrevista que dio a C5N el sábado último, aunque no brindó detalles sino hasta el anuncio de ayer. La decisión se terminó de cerrar el lunes en una reunión que mantuvo el presidente Fernández con el jefe de gabinete Agustín Rossi, en la que se habló de la experiencia y resultados del despliegue militar durante la crisis sanitaria por el covid.
En el encuentro y con el antecedente del empleo de las fuerzas en soporte logístico de la población que había conducido Rossi en Defensa, se definió que el Ejército despliegue fracciones del arma de ingenieros, tropas especializadas con el propósito de colaborar en mejorar las condiciones de urbanización de los barrios carenciados del gran Rosario. “Los ingenieros se encuentran presentes en primera línea, junto a las armas básicas de combate, y en la retaguardia, construyendo caminos, puentes y otras obras de importancia que le permitan hacerles llegar a aquellas, los medios necesarios para el cumplimiento de la misión”, dice la descripción operativa de esta especialidad.
El sistema de trabajo organizado por fracciones, la disponibilidad de grandes cantidades de mano de obra y los vehículos de gran porte con capacidad de transitar todo terreno, le permitieron al Ejército Argentino ayudar a los gobiernos provinciales y municipales en una tarea prioritaria como fue la contención social a través del reparto de víveres y alimentos en sectores necesitados del país durante la crisis del coronavirus. Esos operativos dejaron experiencia que ahora se capitalizará en misiones de reconstrucción urbana; a cargo del arma de ingenieros; complementando el trabajo de las fuerzas federales responsables de combatir el delito de narcotráfico.
El Gobierno Nacional se propone marcar presencia del Estado quizá algo tardía, aunque necesaria para revertir el flagelo del comercio ilícito de drogas en territorio santafesino que trasciende al resto del país. El Ejército dispone en Santo Tomé, provincia de Santa Fe, de una guarnición del Arma de Ingenieros, integrada por el Batallón de Ingenieros I y el Batallón de Ingenieros Anfibio 121.
Cada batallón dispone de medios y capacidades para afrontar situaciones extremas, que los habilitan para servir a la comunidad ante catástrofes, emergencias o desastres naturales. Estas unidades prestaron servicios durante las inundaciones del año 2003, el apoyo por la explosión de un edificio en Rosario en 2013 y en 2015 la construcción de un puente Mabey DD de 60 metros que unió la localidad de Puerto San Martín con San Lorenzo. Hasta el momento no se conoce si las autoridades emplearán las fracciones de la Guarnición Santo Tomé o desplegarán unidades de ingenieros basadas en Campo de Mayo.
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— misionesonline.net (@misionesonline) March 1, 2023
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