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Con comportamientos más propios a los de una barra brava que a los de un interbloque legislativo, los diputados nacionales de Juntos por el Cambio (JxC) lograron bloquear una sesión en la que el oficialismo pretendía ratificar el cargo de la presidenta del cuerpo, Cecilia Moreau, dejar sin efecto la nómina de legisladores propuestos para el Consejo de la Magistratura y aprobar la creación de nueve universidades.
Gritos, empujones, insultos y gestos obscenos plagados de referencias misóginas y xenófobas. No, no estamos hablando de un cruce entre las hinchadas de Nueva Chicago y Chacarita sino de la escandalosa y frustrada última sesión de la Cámara de Diputados de la Nación.
El papelón, directa consecuencia de la notoria incapacidad de los dos principales alianzas del país de resolver sus diferencias por las vías del diálogo y la negociación política, se desató cuando los legisladores de JxC vieron frustrado su intento de dejar sin quorum a la sesión y optaron lisa y llanamente por pudrirla.
El oficialismo buscaba votar un conjunto de proyectos, entre otros, la creación de nueve universidades nacionales. Pero antes debía realizarse una sesión preparatoria para elegir a las autoridades del cuerpo, en la cual el oficialismo pretendía dejar sin efecto la nómina de legisladores propuesta para integrar el Consejo de la Magistratura, en cumplimiento de un fallo judicial.
En un primer momento, JxC intentó dejar a la sesión sin quórum, pero gracias al apoyo de los bloques de la izquierda y de otras fuerzas, el oficialismo logró reunir el número exacto de diputados para iniciar el debate.
Al ver frustrada su intentona de negar el quórum, los legisladores cambiemitas bajaron al recinto con la única intención de bloquear la sesión con el argumento de que el oficialismo había prorrogado el inicio de la sesión de manera antirreglamentaria.
Pero los opositores no plantearon sus objeciones desde sus bancas y haciendo uso de la palabra de manera ordenada, prefirieron en cambio armar un tumulto frente al atril de la presidencia. Fernando Iglesias, Waldo Wolff y Silvia Lospennato encabezaban el griterío que era decorado por gestos obscenos a cargo de Cristian Ritondo (denunciado por su aliada Elisa Carrió y por la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, por supuesto manejo de influencias en la justicia a favor de narcos).
Los representantes del Frente de Todos respondieron con similar intensidad y lo que debía ser una sesión legislativa se convirtió en una vergonzante batahola. Convidados de piedra en medio del escándalo, los diputados del Interbloque Federal se retiraron del recinto y luego los siguieron los de JxC que seguían profiriendo insultos y golpeando bancas.
Ya sin el número necesario, se levantó la caótica sesión.
El bochorno encuentra responsabilidades compartidas pero no equivalentes.
JxC y el FdT volvieron a demostrar que son pésimos ejecutantes del fino arte de la política. En un escenario de relativo equilibrio de fuerzas, son incapaces ya no de llegar a algún acuerdo, sino de dar un debate civilizado. No llegan al grado cero de la política.
Pero en esta oportunidad los representantes de JxC fueron todavía más lejos al recurrir a mecanismos patoteriles para imponer su voluntad. Al fracasar su estrategia de bloquear la sesión negando el quórum, buscaron impedir el debate recurriendo a la violencia.
Justamente quienes impostan énfasis en todos sus discursos e intervenciones mediáticas para declararse incondicionales defensores de la institucionalidad fueron los que abiertamente insultaron a una de las instituciones más importantes de la democracia.
El dilema de siempre
Números de varias consultoras privadas señalan que la inflación volvió a desacelerarse en noviembre, mes en el que se lograría perforar el piso de los 6 puntos, pero con un aumento menor de los productos de la canasta básica.
La consultora ACM y la Fundación Libertad y Progreso relevaron una inflación de 5,9% en noviembre y Eco Go 6,1%. Otras consultoras arrojaron porcentajes bastante parecidos, todos por debajo, aunque no por mucho, del 6,3% que marcó la inflación de octubre.
Pero el dato más alentador pasa por los productos de la canasta básica, la inflación de los pobres, que según la Agrupación Consumidores Libres aumentaron 3,95% en promedio durante noviembre, el porcentaje más bajo en lo que va del año.
Desde el ministerio de Economía ven con entusiasmo esos números porque ven en ellos una posibilidad concreta de cumplir con el objetivo de llegar a un índice de inflación que comience con el número 4 antes de que finalice el primer trimestre del año próximo.
Pero hay un factor que plantea ciertas dudas respecto a la continuidad del camino elegido por el equipo liderado por Sergio Massa para bajar la inflación: el año electoral.
Pero hay un factor que plantea ciertas dudas respecto a la continuidad del camino elegido por el equipo liderado por Sergio Massa para bajar la inflación: el año electoral.
Ocurre que el recorte del gasto público y de la emisión monetaria son elementos centrales, además de medidas menos ortodoxas como los acuerdos y controles de precios, en la cruzada que el tigrense pretende librar contra la inflación.
Pero la tradición política argentina indica que durante los años electorales, sin importar quien gobierne, el gasto público siempre aumenta como estrategia para mejorar el humor social y mantener caliente la rueda del consumo y la actividad económica.
La mayoría de los analistas le reconoce a Massa una mayor inclinación hacia la disciplina fiscal, en comparación a la doctrina kirchnerista, pero comienzan a preguntarse si el titular del Palacio de Hacienda tendrá el mismo respaldo político para llevar adelante su plan cuando se acerque la hora de las urnas, más todavía si las encuestas no le sonríen al oficialismo como ocurre hasta ahora.
Dentro del Gobierno se da el mismo debate, hay quienes prefieren llegar a las elecciones con un nivel más bajo de inflación aunque ello se logre al costo de una desaceleración de la actividad económica y del consumo, pero otros entienden que profundizar el ajuste le podría valer al Frente de Todos la pérdida de su mayor base de sustentación: las clases populares que habitan el superpoblado Conurbano Bonaerense.
La disponibilidad de dólares aparece en el centro del debate porque si el Gobierno consigue muchos dólares, podrá incrementar importaciones a tipo de cambio oficial (muy por debajo de cualquier otra cotización) y con ello mantener firme una de las pocas anclas que le quedan para contener la inflación sin afectar al consumo ni a la actividad agregada.
El problema es que si continúa con la política de regalarle tipos de cambio diferenciales a los sojeros, deberá asumir el creciente costo fiscal y emisión monetaria que implica pagarle a los exportadores una cotización más alta que la que le toca a los importadores.
Eso de pagar 230 pesos a los exportadores por los mismos dólares que luego serán vendidos a 170 y pico a los importadores es un negocio que tarde o temprano generará costos muy difíciles de afrontar para el Gobierno.
La mala noticia para el país es que si la sequía no da tregua, la producción del campo se verá muy afectada y los dólares no van a aparecer por más incentivo que pretenda impulsar el Gobierno.
Por el lado positivo, es esperable que la demanda de divisas para la importación de energía sea menor el año próximo, lo que permitirá un ahorro considerable respecto al año en curso.
La más transparente de todo el Norte
El instituto IERAL, dependiente de la Fundación Mediterránea difundió un índice que mide el grado de transparencia de las administraciones públicas en 75 municipios. Según explica el informe firmado por las investigadoras Vanessa Toselli y Paula González, para elaborarlo se analizaron 52 aspectos considerados relevantes, sobre la base de la herramienta Mapa Infoparticipa del Laboratorio de Periodismo y Comunicación para la Ciudadanía Plural de la Universidad Autónoma de Barcelona.
Los 52 indicadores relevados responden a los siguientes ejes: autoridades, órganos de gobierno, rendición de cuentas, presupuesto, contrataciones y licitaciones públicas, comunicación institucional, información general y participación ciudadana.
El índice mide no sólo disponibilidad, sino también accesibilidad a la información sobre la gestión pública y aquella de interés para la ciudadanía publicada en los sitios web oficiales de los municipios.
El cálculo se realiza en números índices (del 0 al 100), tomando los resultados obtenidos tomando como base, para cada categoría, la máxima distancia observada entre los valores individuales y el mejor desempeño alcanzado en cada eje. Así, se asignó el valor 100 a los municipios con menor grado de transparencia, y 0 a las localidades mejor ponderadas. En el caso de los resultados provinciales, se realizó el promedio simple de los 52 indicadores observados para las jurisdicciones seleccionadas (según el criterio poblacional) a fin de realizar el cálculo del índice general.
Misiones aparece en el sexto lugar entre las provincias más transparentes del país, superada solamente por las jurisdicciones más desarrolladas del Centro del país y superando holgadamente a todas las demás del Norte Grande.
En una escala de 0 a 100 en la que 0 indica el estadio de mayor transparencia y 100 el de mayor opacidad posible, con 53 puntos Misiones se ubica 15 puntos por debajo de Corrientes y Chaco y 23 puntos por debajo de Formosa.
A nivel provincial, surge que el mejor desempeño corresponde a las localidades del centro del país, en especial de la subregión Centro (CABA, Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires), inmediatamente después de ese grupo aparece Misiones, que de ese modo se convierte no solo en la provincia más transparente de todo el Norte Grande (NOA+NEA) sino también en la de mejor índice fuera de la región pampeana, la más rica del país.
Un paso más cerca
Esta semana Misiones dio un paso más en su camino por hacer realidad el viejo anhelo de contar con un régimen impositivo diferenciado a través de la instauración de un área especial aduanera en todo el territorio provincial.
Sin cambios, agregados ni omisiones, se publicó en el Boletín Oficial de la Nación la ley de Presupuesto 2023, que incluye una delegación de facultades del Congreso al Ejecutivo para que este pueda crear por vía de decreto áreas aduaneras especiales.
Incluso antes de que la ley fuera sancionada por el Senado, el Gobierno de Misiones ya había iniciado gestiones para que el Ejecutivo nacional haga uso de esas facultades delegadas para crear un área aduanera especial que abarque a todo el territorio provincial e incluya beneficios impositivos que impulsen la producción, la industria y la radicación de nuevas empresas.
El objetivo de esta cruzada no es más que el crecimiento y el desarrollo económico de la provincia y sus habitantes. El mejoramiento de las condiciones para exportar madera, yerba, té, tabaco, productos del Parque Industrial, servicios vinculados a la economía del conocimiento, el saber y el conocimiento de los misioneros, en definitiva todo apunta a generar riqueza, ingresos y bienestar.
Desde el Gobierno provincial aseguran que en esa lógica de trabajo y enfocado en ese objetivo se encuentra el Frente Renovador los 365 días del año y se mostraron alejados de los escándalos que marcan el pulso de la política nacional.
Oposición en retroceso
Los referentes misioneros de Juntos por el Cambio, acostumbrados a escandalizarse frente a cualquier denuncia, sospecha o evidente irregularidad en la que incurra el Gobierno nacional, esta semana no dedicaron la más mínima mención al escándalo que sus referentes nacionales provocaron para impedir el normal desarrollo de la actividad legislativa en la Cámara de Diputados de la Nación. Aparentemente estaban ocupados siguiendo las alternativas del mundial.
En Misiones ese Frente está al borde la ruptura. La belicosa Patricia Bullrich salió en una radio posadeña a respaldar la candidatura a gobernador de su pupilo Martín Goerling “por afuera o por adentro de JxC” y asegurando que nadie puede arrogarse la candidatura nacional, en otro claro desafío a los radicales.
El puertismo, que tiene en la Legislatura misionera a un con pedido de embargo por un juicio laboral en el Sur del país, también quiere poner una candidata propia en la fórmula. Muchos caciques y pocas propuestas para pretender gobernar la provincia. Hace falta más que solamente oponerse y criticar sin dar soluciones a nada de lo que demanda la sociedad. Volver al modelo de los 90 no es una opción que los misioneros tengan en sus aspiraciones.
La yerba al poder
Los que no quieren saber nada con eso de volver a los 90 son los productores de yerba mate y los pequeños industriales que en los últimos 19 años lograron un crecimiento (con altibajos atribuibles a las condiciones de mercado) que se reflejó este fin de semana en una nueva edición de la Feria Matear en Buenos Aires.
Se destacó la participación de pequeñas yerbateras que ofrecen un amplio abanico de marcas que enriquecen la oferta del producto madre de la región pero que también permiten un reparto más equitativo de la gran torta de riqueza que genera este sector.
“Es una gran alegría contar con más de 130 expositores, sobre todo los pequeños molinos, establecimientos familiares, cooperativas y emprendedores que nos acompañaron en esta convocatoria”, subrayó el presidente del INYM, Juan José Szychowski, tras el corte de cintas inaugural.
Para los expositores, sobre todos los pequeños establecimientos y emprendedores, la presencia en la feria es una oportunidad de oro para dar a conocer sus productos. “El apoyo del INYM es muy relevante porque somos una empresa chica y familiar de Tres Capones, y nos cuesta mucho llegar a este tipo de ferias. Esto nos ayuda mucho”, comentó Lucas Pawluk, de yerba mate Sol y Lluvia.
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