El escándalo ya se había disipado y los futbolistas se habían dirigido hacia los vestuarios de la cancha de All Boys. El polémico arbitraje liderado por Jorge Baliño (asistido por Diego Abal y Diego Ceballos en el VAR) llevó a que se exacerbaran los ánimos de todo el plantel y cuerpo técnico de Patronato, que cayó sobre la hora con Barracas Central.
Un gol anulado y una expulsión en el primer tiempo, un penal en contra (sancionado justo después del tanto invalidado a instancias del VAR que hubiera sido el 2-1 a favor) y un tiro libre polémico que derivó en la victoria del Guapo fueron demasiado para los de Entre Ríos. Por la gresca con las autoridades, pasaron toda la noche en Capital Federal.
Los ánimos se fueron calmando pese a que la indignación se mantuvo. Mientras los protagonistas se bañaban, un tablero de electricidad se incendió en el estadio Islas Malvinas, lo que provocó un corte de luz que precipitó la salida de los árbitros y locales. Los visitantes, demorados por la Policía, permanecieron un par de horas en el vestidor y tuvieron que cenar allí. Recién pasada la medianoche abandonaron el estadio (el partido había terminado alrededor de las 22).
“Fue una noche difícil, no la pasamos bien por algo de lo que no fuimos culpables. Estamos amargados por la situación, por todo lo que vivimos. No lo merecíamos”, fue lo que declaró pasada la media mañana Axel Fernández, uno de los futbolistas que fueron detenidos por la Policía junto al entrenador de arqueros, Damián González.
El abogado del conjunto roijnegro, Mariano Lizardo, manifestó en TN que “mi consejo profesional fue que se negaran a declarar. Es muy prematuro todavía para poder hacer y preparar una declaración. Faltaban pruebas fílmicas y testimoniales”. En tanto que el presidente del Patrón, Oscar Lenzi, se refirió a la situación general: “A nivel policial no hubo ningún problema, el único problema es que estuvieron parados mucho tiempo delante de la Policía por el sistema que van atendiendo por orden de llegada. Estuvieron dos o tres horas tirados en el celular, imagínense que estaban después del partido, todos acalambrados”. Los jugadores llegaron a comunicarse con sus familias vía telefónica, aunque se quedaron sin batería llegada la mañana.
Fernández, Matías Pardo, Juan Barinaga, Justo Giani y el colaborador del entrenador Facundo Sava pasaron la noche entre la Comisaría Vecinal 10 A de la Policía de la Ciudad y el móvil policial que finalmente los trasladó alrededor de las 10 de la mañana a la Fiscalía Especializada en Eventos Masivos y Espectáculos Deportivos a cargo de Celsa Ramírez. Allí debieron responder por el delito de “lesiones y atentado y resistencia a la autoridad” tras ser acusados de quebrantar los artículos 96 y 238, inc 4to. del Código Penal.
El vicepresidente de la AFA Marcelo Achile describió el estado de los implicados: “Están cansados, estuvieron muchas horas en los celulares, los pasaron de un lado a otro. Estuvieron en un lugar, dos horas en el celular, ahora en la comisaría otro tanto. Están agotados porque estuvieron toda la noche, mucho tiempo en el celular, donde estuvieron medio apretados”.
Como los efectivos no quisieron juntarlos con otros detenidos comunes, los integrantes de la delegación de Patronato pasaron varias horas en una camioneta de la Policía, según confiaron ellos mismos, hasta que casi se hicieron las 7 de la mañana, momento en el cual fueron ingresados a la Comisaría. Por recomendación del abogado del club, se negaron a declarar.
“Nos tocó vivir todo esto, pero estamos fuertes para seguir adelante. Nosotros no agredimos a nadie, solamente nos defendimos. Estamos tranquilos que hicimos bien las cosas, que no hicimos nada grave. Esto pasa en todos los partidos y anoche nos tocó con Barracas. Esperemos que lo mejoren porque el fútbol es algo lindo. Mis compañeros están como yo, tristes por la noche que pasamos, que no la merecíamos”, completó Fernández, exhausto tras una madrugada sin dormir y pasado de revoluciones.
Tal vez te interese leer: Liga Profesional | Ibarra pierde un jugador clave de cara a los próximos partidos
Pardo fue el otro futbolista que tomó contacto con la prensa: “Queremos llegar a Paraná y descansar porque estuvimos toda la noche sin dormir. Yo volvía a las canchas después de 7 meses y tenía muchas ganas de jugar. El domingo tenemos una final (contra Boca) y estamos muy tristes por lo que pasó, pero mañana entrenaremos y pensaremos en lo que viene”.
El contingente entrerriano, en horas del mediodía, se dirigió hacia el Aeropuerto de Aeroparque listo para embarcarse para el vuelo de las 17.20 rumbo a su provincia. Recién se reencontrará este jueves para practicar pensando en el duelo del fin de semana ante el Xeneize (este domingo desde las 18).
Brasil y Colombia jugarán la gran final de la Copa América femenina 2022https://t.co/TUrDe3QaJQ
— misionesonline.net (@misionesonline) July 27, 2022
Comentarios