Anita Álvarez, de 25 años, se transformó involuntariamente en la figura central del Mundial de Natación que se celebra en Budapest, Hungría. Tras desmayarse súbitamente mientras hacía su rutina en la prueba de natación artística y ser rescatada por su entrenadora Andrea Fuentes del fondo de la piscina, donde estuvo cerca de dos minutos sumergida, se discute por estas horas si la deportista volverá a competir este viernes en la final de su especialidad.
Depende, claro, del visto bueno a los médicos del seleccionado de Estados Unidos. Porque la voluntad de la nadadora, que en las últimas horas habló con los medios y detalló qué sintió segundos antes de desvanecerse, es seguir compitiendo.
«Solo sentí que estaba dejando todo en la piscina. En la última figura, donde tengo que despedirme levantando un brazo me recuerdo pensando: “¡Empuja ese brazo! ¡No abandones ahora! ¡Dalo todo hasta el último segundo!”. En el pasado he sentido que me desvanecía. Esta vez creo que estaba muy conectada mentalmente, tan metida en mi papel, viviendo el momento tan intensamente, que estaba realmente disfrutando de mi actuación. No sentí el dolor hasta que terminó. Seguí, seguí, seguí… A veces no sientes dolor hasta que paras. Es como el atletismo. Me gusta correr. A veces estás corriendo y en el instante que paras es cuando sientes el golpe de dolor. En esta rutina me encontraba genial, tan cansada como siempre pero disfrutando. Y cuando sentí que por fin podía permitirme relajar fue cuando todo se volvió negro. No recuerdo nada más», relató en diálogo con el diario deportivo As de España.
Al ser consultada sobre las fotos de su rescate que se viralizaron a la velocidad de la luz y dieron la vuelta al mundo en las portadas de los principales diarios del mundo, Álvarez reconoció que en un principio no le gustó nada verse en esa situación.
«Al principio me chocaron. No esperaba que se publicara algo así. Pero después me lo tomé con calma. No quise verlo con pesimismo. Ahora pienso que las fotos son bonitas de alguna manera. Verme ahí abajo en el agua, tan en paz, tan en silencio, y ver a Andrea bajando con su brazo extendido intentando alcanzarme como un superhéroe… A veces el lugar más pacífico de la tierra está bajo el agua: cuando te sientas en el fondo de la piscina en silencio. Sientes que no pesas, estás contigo misma. A mí me encanta. A veces necesito ese momento. Y en las fotos parece todo muy natural, aunque sacar a una persona del fondo de una piscina y levantarla hacia la superficie es muy difícil. Sobre todo cuando te sumerges a tres metros de profundidad con tus ropas de calle. ¡Esta mañana cuando se levantó dijo que sintió que tenía lumbago!», sostuvo.
La pregunta del millón pasa por saber si estará este viernes en la final de natación artística y Álvarez parece dispuesta a volver a zambullirse.
«Descansé mucho, toda la noche y todo el día. Siento mi cuerpo totalmente normal. Es algo que ya me ha ocurrido. Descansas y al día siguiente vuelves al agua. Tienes que hacerlo así para no cargar tu cabeza de miedo. Los médicos me han revisado. Siento que mi cuerpo puede gestionarlo y está todo en mi mente. Quiero terminar esta competición, que ha sido la mejor que hemos tenido en Estados Unidos en mucho tiempo. Estoy muy contenta con mi solo, y ahora no quiero faltar al compromiso con mi equipo en la final del libre. Quiero acabar estos campeonatos con la cabeza alta. Quiero que mis compañeras sientan que pueden confiar en mí y esto nos haga más fuertes», sostuvo a la espera de un guiño de los médicos.
¿Podrá Álvarez participar el viernes?
La alineación prevista del equipo estadounidense para el viernes incluye aún a Anita Álvarez. Fuentes, su entrenadora y responsable de salvarle la vida, ya manifestó que horas después del rescate su pupila se encontraba en perfectas condiciones. Además, los médicos habrían acreditado su buen estado de salud.
«La verdad es que está muy bien, aunque no lo pueda parecer, está perfecta, ha dormido toda la mañana y quiere nadar mañana. Los médicos le han hecho todas las pruebas y dicen que esta bien, pero es algo que todavía tenemos que valorar», coincidió Fuentes.
El rescate milagroso
Anita Álvarez disputó por la tarde la final de solo y culminó en séptima posición. Al término de su ejercicio, que completó con normalidad, fue cuando se desvaneció. Permaneció algunos minutos sumergida, y fue cuando llamó la atención de su entrenadora que no dudó en arrojarse a salvarla.
«En ese momento no pensé, simplemente me dije tienes que llegar lo más rápido que puedas, sacarla a la superficie y hacer que respire», explicó la entrenadora.
Fuentes, ganadora de cuatro medallas olímpicas con España y actual seleccionadora de Estados Unidos, sacó del fondo de la piscina a Alvarez antes de que llegasen los socorristas.
«Ahora que lo pienso es normal, porque ellos no conocen este deporte tanto como yo y tampoco nadan tan rápido como yo, por lo que es normal que no reaccionaran tan rápido. Por eso me tiré, porque vi que no iban y me dije no puedo esperar ni un segundo más», comentó acerca de su accionar y del de los rescatistas.
Fuentes explicó a emisoras de radio españolas que su discípula se desmayó por el esfuerzo desplegado durante su rutina.
«No se me va a olvidar, no he vivido muchas experiencias de estas. Ha sido un susto grande, aunque no es la primera vez que le pasa. Es una deportista a la que le gusta llegar al límite, pero hoy se ha pasado 20 pueblos. Le he dicho que no lo haga más», declaró en la Cadena Ser el miércoles.
«Creo que ha estado dos minutos al menos sin respirar porque tenía los pulmones llenos de agua, pero la hemos podido llevar a un buen sitio, ha vomitado el agua, tosido y ya está», señaló a la radio Rac1.
«He intentado despertarla a bofetadas y abriéndole la mandíbula», añadía a la emisora Cope.
Este es el tercer Mundial de natación de la deportista estadounidense, que también se habría desmayado durante un clasificatorio para los Juegos Olímpicos en Barcelona el año pasado.
El comunicado de USA Artistic Swimming
«Ver la emergencia médica de ayer de la dos veces olímpica Anita Álvarez fue desgarrador para nuestra comunidad. Anita realizó una actuación excepcional en solitario y ha competido brillantemente en cuatro pruebas preliminares y tres finales a lo largo de seis días del Mundial 2022», señaló USA Artistic Swimming.
«Anita ha sido evaluada por el personal médico y seguirá siendo controlada. Ya se siente mucho mejor y aprovecha el día de hoy para descansar. El hecho de que compita o no en la final por equipos libre del viernes 24 de junio será determinado por la propia Anita y el personal médico experto», agregó.
Por qué tardaron tanto los rescatistas
De acuerdo con un comunicado emitido por la Federación Internacional de Natación (FINA) los socorristas no actuaron de inmediato por un impedimento reglamentario que solamente pudo haber sido revocado con la autorización expresa del cuerpo de jueces a cargo de la sanción del evento.
“Solo los jueces, y solamente ellos, podrán dar la orden de saltar a la piscina para socorrer a una competidora que en ese momento haya enfermado. Este protocolo es así para evitar cualquier malentendido por parte de los socorristas”, señaló el documento emitido por la federación.
Fuente: Clarín
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