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Su pareja, residente de la ciudad sudafricana de Soweto, escondía en su heladera el cuerpo desmembrado de una mujer que fue encontrado por la chica cuando él salió a comprar comida.
“Abrió la bolsa y vio una mano”, relató una testigo a los medios locales de Sudáfrica. La mujer, apenas entendió de qué se trataba, salió corriendo y pidió ayuda a los vecinos, quienes llamaron a la Policía.
Al llegar al hogar, Hlabangwane, de 26 años, intentó suicidarse, pero los oficiales pudieron detenerlo. El muchacho fue hospitalizado en una clínica cerca de la localidad y luego de recibir tratamiento se presentó ante un tribunal, donde fue imputado por asesinato.
La Policía aseguró, además, que algunas partes del cuerpo de la víctima habían sido quemadas. Los vecinos del asesino explicaron que es una persona tranquila, que no tiene amigos y explicaron que no habían visto a su exnovia durante más de un mes y en el que él llevó a otras mujeres a su casa. Además, declararon que había estado tratando de conquistar a una chica de tan sólo 15 años de la zona para que lo visitara.
La joven había conocido a su novio por Facebook y habían tenido su primera cita el viernes, cuando la chica pasó la noche con él en la casa que alquilaba. La Policía afirmó, además, que dentro de la bolsa no estaba la cabeza, y que está todavía la están buscando.
El concejal local del área, Phelelani Sindani, aseguró que el hombre había estado pagando su alquiler a tiempo y era un ex empleado de una compañía de seguros. Ante el macabro hecho que tomó lugar, la comunidad quedó muy shockeada.
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