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Los trabajadores a cargo de la restauración de una fuente en Verviers, Bélgica, encontraron un cofre con el corazón del primer alcalde de la ciudad: Pierre David. De esta manera, confirmaron la autenticidad de una antigua leyenda urbana.
Según anunció Maxime Degey, responsable de obras públicas de Verviers, el corazón de David (nacido en 1771) fue encontrado el pasado 20 de agosto en el monumento que lleva su nombre ubicado en el centro de la ciudad e inaugurado a fines del siglo XIX. «Una leyenda urbana se ha hecho realidad: el cofre estaba en la parte superior de la fuente, justo al lado del busto de Pierre David, detrás de una piedra que habíamos quitado durante su renovación», aseguró.
El primer alcalde de la ciudad: Pierre David.
Un grabado en el cofre de zinc asegura que fue colocado en el monumento el día de su inauguración. El corazón está sellado en un frasco de alcohol dentro del pequeño recipiente de metal. «El corazón de Pierre David fue colocado solemnemente en el monumento el 25 de junio de 1883», dice la inscripción.
Conservar su corazón fue la manera que encontró la ciudad de Verviers para homenajear a David. Pues el hombre supervisó los asuntos de la urbe desde 1798 hasta su muerte, en 1839. También devolvió la paz a la localidad después de la revolución y creó el primer cuerpo de bomberos y la escuela secundaria.
Según la leyenda, tras la muerte de David, a los 68 años, las autoridades de la ciudad pusieron en marcha un fondo de recaudación para un monumento en honor a él, y con el consentimiento de su familia, los cirujanos extrajeron su corazón para que pudiera ser sepultado en la fuente.
El cofre, que no ha sido abierto, se exhibirá en el Museo de Bellas Artes de la ciudad hasta mediados de septiembre, en una sala dedicada a la memoria de David.
Christine Magis, concejal de Verviers, felicitó en su página de Facebook a los equipos que estuvieron a cargo del trabajo, así como a todo el personal del museo que albergará el corazón de David. Además, destacó que actuaron «con el mayor respeto y con mucho profesionalismo» para preservar la riqueza del patrimonio de la ciudad.
Fuente: La Nación
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